El Derecho Romano es el conjunto de normas jurídicas que se aplicaron en la antigua Roma desde el siglo VIII a.C. hasta el siglo V d.C. Su estudio y aplicación se extendió por todo el Imperio Romano y, posteriormente, por los países que fueron influidos por el derecho romano, especialmente los países de Europa continental.
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El Derecho Romano se caracteriza por ser una disciplina jurídica muy completa y sofisticada, que incluye el estudio de diversas ramas del derecho como el derecho civil, el derecho penal, el derecho procesal, el derecho mercantil, entre otros. Además, su influencia ha sido duradera en el mundo occidental, y muchas de las instituciones y principios del derecho moderno tienen su origen en el derecho romano.
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Entre las fuentes del Derecho Romano se encuentran las leyes, los senadoconsultos, los edictos de los magistrados, las respuestas de los jurisconsultos y la costumbre. Además, se caracterizó por el desarrollo de la figura del jurista, quien era el experto en la interpretación y aplicación del derecho romano.
El estudio del Derecho Romano sigue siendo relevante en la actualidad, ya que ha dejado un legado importante en la historia del derecho y en la formación de la cultura jurídica occidental.
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